Anacridium aegyptium. Una ninfa (estadio joven).
La langosta egipcia o saltamontes egipcio (Anacridium aegyptium) en poblaciones densas está considerada como una auténtica plaga y no en vano ya desde tiempos ancestrales se narran terribles invasiones de estos insectos ortópteros provocadas por diversos factores y que arrasan todos los cultivos y vegetación allá por donde pasan.
Miden entre unos 3 ó 7 cm depende de su sexo, los machos son más pequeños y soportan tremendamente bien el calor, proceden como su nombre indica de África y le gusta refugiarse en árboles, setos y arbustos. Orden Orthoptera. Es la especie más abundante de su subfamilia en la Península Ibérica. Ampliamente distribuido, se alimenta de muchas y diferentes plantas. Después del apareamiento, estos pasan el invierno como adultos saltamontes. El desove se produce en primavera justo debajo de la superficie del suelo y las ninfas aparecen en abril. Las ninfas tienen el aspecto de los adultos, su color varía del amarillo al verde claro y ocre y las alas son pequeñas o no existen, ya que se desarrolló gradualmente después de cada muda. Su alimentación es estrictamente vegetariana y cuentan con unas potentes mandíbulas. Cuando llega el frio inverna y en primavera suelen iniciar el ciclo reproductor.
Presentan un par de antenas robustas, cortas, no mucho más largas que el cuerpo y con una coloración negruzca acusada. El pronoto se caracteriza por tener una banda con un tono anaranjado. La coloración varía durante el ciclo biológico, pasando por una tonalidad verdosa en el estadio ninfal hasta el estadio adulto, cuya pigmentación es grisácea-oliva.
El estadio de ninfa se origina en primavera tras la eclosión de los huevos. Antes de llegar al estado adulto, ésta pasa por 4 fases ninfales en la que va desarrollando ciertas estructuras anatómicas, como las dos pares de alas. En los meses estivales ya se consideran adultas. La cópula y la puesta de huevos tienen lugar a finales de verano e inicios de otoño. La hembra perfora el terreno depositando los huevos y cubriéndolos con una sustancia espumosa que se endurece y protege la puesta durante el otoño e invierno. Puede llegar a depositar hasta más de 500 huevos. Finalmente, durante la época invernal los individuos adultos pasan a un estado de hibernación.
Presentan un par de antenas robustas, cortas, no mucho más largas que el cuerpo y con una coloración negruzca acusada. El pronoto se caracteriza por tener una banda con un tono anaranjado. La coloración varía durante el ciclo biológico, pasando por una tonalidad verdosa en el estadio ninfal hasta el estadio adulto, cuya pigmentación es grisácea-oliva.
El estadio de ninfa se origina en primavera tras la eclosión de los huevos. Antes de llegar al estado adulto, ésta pasa por 4 fases ninfales en la que va desarrollando ciertas estructuras anatómicas, como las dos pares de alas. En los meses estivales ya se consideran adultas. La cópula y la puesta de huevos tienen lugar a finales de verano e inicios de otoño. La hembra perfora el terreno depositando los huevos y cubriéndolos con una sustancia espumosa que se endurece y protege la puesta durante el otoño e invierno. Puede llegar a depositar hasta más de 500 huevos. Finalmente, durante la época invernal los individuos adultos pasan a un estado de hibernación.
Reino: Animalia
Tipo: Artrhopoda
Subtipo: Hexapoda
Clase: Insecta
Subclase: Pterygota
Orden: Orthoptera
Familia: Acrididae
Género: Anacridium
Especie: A. aegyptium
Género: Anacridium
Especie: A. aegyptium
Detalle del Arolio en sus patas delanteras sin adaptación como instrumento cavador. Estructura de forma almohadillada, situada entre las uñas del pretarso. Habitualmente es utilizado para adherirse a superficies lisas.
Es fácilmente identificable también por los ojos característicos con rayas verticales blancas y negras.
Es fácilmente identificable también por los ojos característicos con rayas verticales blancas y negras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por vuestros comentarios!